El Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales suscribió, a través de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia dependiente del Ministerio de Desarrollo Social, con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia un convenio marco de cooperación, financiamiento y asistencia técnica para la implementación del “Plan Nacional de Acción por los derechos de niñas, niños y adolescentes 2008-2001”.  

El “Plan Nacional de Acción por los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes 2008-2001” tiene como objetivo principal la tarea de garantizar sus derechos . Para ello se propone entre sus acciones el aumento de los grados de igualdad, priorizando “lo territorial y de género”, el acceso a bienes y servicios de igual calidad, la disminución de las tasas de mortalidad infantil y materna, y la inclusión en el nivel inicial educativo al cien por ciento de la población menor a los cinco años de edad.

En este aspecto el plan apunta también a que todos los niños y adolescentes completen los diez años de educación obligatoria, y a promover la terminalidad del secundario. Todo esto enmarcado en la necesidad de disminuir la brecha existente entre los sectores más ricos y más pobres, dado que en el quintil más pobre se encuentra la mayor cantidad de niños.

En su intervención, la ministra Kirchner señaló que desde el Ministerio de Desarrollo Social “hablamos de política de derechos, de equidad territorial y este es el gran desafío que tiene la Argentina, porque no es lo mismo el Noroeste que el Noreste, que el Centro y la Patagonia”.

De seguido significó que con la ley 26.061 “dejamos atrás cien años de patronato y mediante la nueva ley hubo un camino en una política de derechos para niños y niños de nuestro país. Pero la ley por sí sola sin una instancia operativa queda sólo como una norma. En este sentido esos caminos fueron abiertos por todos los organismos que apuestan al desarrollo humano, y en este caso al desarrollo de niños y niñas”.

Calificó como un acierto el Plan de Nutrición y Familia, una de las primeras iniciativas que el Ministerio de Desarrollo Social comenzó a implementar con el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia. Respecto a ello apuntó que “hay otros países que quieren hacer algo similar, no igual porque lo igual termina siendo enlatado, es decir aprovechar la experiencia que tuvo la Argentina para aplicarla en otros países”.

Añadió que con el organismo “ha sido un trabajo de crecimiento y a nivel de sistemas de protección, además de dejar esos cien años de patronato, establecimos una línea institucional para el trabajo”. En este aspecto destacó el impulso de la cartera social para que “cada provincia establezca finalmente un organismo rector para las políticas de niñez e infancia”.

Siguiendo con la rama institucional mencionó el Consejo Federal de Niñez y “la puesta en marcha de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia, bajo la conceptualización de derechos, esta rama institucional permite establecer un protocolo de abordaje para todo el país”.

Por su parte Acosta Vargas remarcó “la apertura que ha tenido el Ministerio de Desarrollo Social, que realmente aceptó un desafío que ha sido enorme, con una mirada comprometida. Quiero reconocer que tiene un compromiso profundo por hacer las cosas lo mejor posible, ¡cómo quisiera poder mostrar hoy como ha cambiado la situación de los chicos uno por uno!”.

Afirmó, además, que “este es un país que se puso realmente al borde de un abismo y ningún país salió tan rápido teniendo una energía y una capacidad de transformar importantísima”.

Respecto a la pobreza la funcionaria manifestó que no se puede simplificar en “una cuestión material, sino que es la suma acumulada de falta de oportunidades generacionales; es perder el rumbo y el proyecto de vida, en tanto se prioriza la inmediatez, y en esa condición casi nos deshumanizamos. Por eso la protección social debe apuntar a resolver la falta de oportunidades que se transmite y se reproduce generacionalmente”.